Estimados(as) amigos(as) y clientes:
Siempre es bueno ir adecuándose en un momento en que los cambios son tan radicales que nos pueden generar muchas preocupaciones, pero esto se evita abriéndose a que ellos son irreversibles y lo que más importa es cómo nos adecuamos para incorporarlos en nuestras organizaciones, sin pensar en que podremos hacer frente al nuevo escenario con un actuar tradicional: hoy o se cambia o se desaparece (obviamente en forma gradual).
Sólo para que vean que muchas veces los cambios ya son parte de nuestra vida y no hemos tomado conciencia de que sí estamos inmersos en esta nueva carretera global.
Se han preguntado donde están los datos personales? Basta hoy con conocer el nombre de una persona y simplemente colocarlo en un buscador para que se desplieguen alternativas de identificación desde el RUT, profesión, estado civil y si es más específico identificar el lugar de trabajo, como también todo lo publicado referido a ese nombre…. Privacidad!!! Nada.
Otra pregunta es considerar que hoy “casi todo” pago se realiza electrónicamente: uso de tarjeta de crédito o débito o transferencia bancaria. Los cheques ya son un artículo de reliquia y rareza. Pago el taxi con tarjeta de crédito, el café de media mañana, el corte de pelo, etc.
Dado lo anterior, hay que preguntarse cómo estamos preparados en nuestras empresas y en nuestra profesión o actividad laboral, para seguir siendo un recurso considerado valioso. De lo contrario, veremos desaparecer nuestra empresa o actividad. Sólo para dar algunos ejemplos: ya no está la definición vital de tener un local para realizar el contacto con los clientes (por ejemplo, puedo sólo virtualmente comunicarme con ellos y remitirles el producto o realizar la prestación que me solicitan vía internet). Entonces, ya no están los trabajadores que se desempeñaban como empaquetadores en los supermercados, los cajeros de banco, los cobradores en los estacionamientos y para que decir negocios relacionados con las bolsas plásticas, como uno de los últimos efectos u otros como las imprentas, que el último cambio es la esperada obligación de boletas electrónicas para todos los contribuyentes. También un tema relevante es que los nuevos consumidores ya no requerirán ir a un restorán, sino que pedirán distintos servicios a su casa o lugar de reunión, con lo cual han proliferado los servicios de “traslado” de bienes, eliminándose la existencia de lugares donde se consumía (por ejemplo, vemos que Raúl Correo y Familia cerró su estupendo restorán y que una fábrica de calzado como Albano, también cerró su línea productiva).
Pero no hay que asustarse, sino que enfrentar lo que viene y tener el convencimiento de la necesidad de mirar los nuevos acontecimientos con prontitud y decisión, para lo cual hay que invertir tiempo, conocer las alternativas, atreverse a realizar cambios y a meterse en la nueva forma de vivir y desarrollo de nuestras actividades.
Nosotros prontamente estaremos comunicándoles algunos cambios que estamos preparando, lo que afectará nuestra forma de desarrollar los servicios, como también la preocupación de ir acercando las nuevas tecnologías a las distintas actividades que se desarrollan, con lo cual obviamente avanzamos juntos a nuestros clientes en tomar partido en el nuevo desarrollo de cada actividad, lo que no puede ser ignorado como un fenómeno ajeno (ya habrán avances en el proyecto de modernización tributaria, como la exigencia de boletas electrónicas para todos los contribuyentes, como también en otros proyectos de digitalización que está impulsando el gobierno).
Los invito a leer una publicación que les dará más información especializada
Nota: pueden compartir esta comunicación con todos los interesados.
Saludos,
